sábado, 20 de abril de 2013

Chilling I

Voy a encontrarte, de una u otra forma y así no lo quieras. Ahí voy a estar. Buscándote desde el cerrar de mis ojos hasta el voltear de mis hojas y sin razón. Sin razones. Sé que aunque no lo esperes, volverás. Volveré a encontrarte, y de ninguna manera te vas a enterar cómo fue que sucedió. Estoy completamente segura que aunque me preguntes el por qué no diré nada. Sólo te veré. Ahí, como siempre. Lo más bonito es que poco a poco me devolverás tu mano, acariciarás mis dedos y sonreirás. Lamentarás todo lo que he llorado y sacarás despacio, una a una, todas las lágrimas incrustadas que por mi culpa tu espalda cargó. Me reclamarás que las tuviste que cargar. Karmar. Karma. Me las devolverás y las quemaremos, así el fuego que arde ya no queme y sólo caliente. Que caliente mucho y de nuestras almas salgan vapor. Ellas volarán, viajarán por el tiempo y el recuerdo; y serán ese olvido que no olvidamos. Al menos yo no. Entonces algún día de mañana notarás que he mentido; que he jugado con tu vida y que usé un par de hilos para volver. Volveré para contarte lo diferentes que somos o seremos y escribir en tu frente: Qué bien, has caído.